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Compases: cómo se organiza y mide la música

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Alguna vez te has preguntado cómo hacen los músicos para mantenerse sincronizados cuando tocan juntos? ¿Cómo saben cuándo tocar rápido o despacio; o cuándo tocar notas al unísono? Pues, amigos míos, ésa es la magia de los compases.

Los compases organizan el ritmo. Son un conjunto de reglas que guían a todos los músicos. Entender los compases es la clave para seguir el ritmo y crear música. Es la clave tanto para rasguear la guitarra como para tocar la batería, o bailar con los dedos sobre las teclas del piano.

A medida que nos adentramos en el mundo del piano, es crucial comprender este concepto. Y eso es lo que exploraremos hoy: el mundo de los compases. Así que, tanto si eres un músico experimentado que busca un repaso, como si eres un principiante que intenta descifrar las complejidades de la teoría musical, esta guía arrojará algo de luz sobre los misterios rítmicos de la música.

Puntos clave

  • El compás indica cuántas cuentas hay en cada uno de ellos y qué tipo de nota recibirá cada cuenta.
  • El número superior suele ser 2, 3, 4 ó 6.
  • El número inferior suele ser 4 u 8.
  • Los compases simples dividen la música en grupos de 2 y los compuestos en grupos de 3.
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¿Qué son los compases?

Los compases son las notaciones de las partituras que indican la estructura rítmica de una obra. Se representan mediante una fracción (dos números apilados verticalmente) al principio de una partitura. El número superior indica la cantidad de tiempos de cada compás;, mientras que el inferior define la figura que representará un tiempo.

Compáses-en-música
Tomemos un compás común como el de 4/4. El «4» superior indica que hay cuatro tiempos por compás, y el «4» inferior significa que una negra equivale a un tiempo. Entender los compases es fundamental para aprender e interpretar la música. Sobre todo cuando se tocan instrumentos rítmicos como el piano.

Cómo leer un compás

Como ya se ha dicho, el compás se representa con una fracción que se coloca al inicio de la partitura y que consta de dos elementos: un número superior y un número inferior. El número superior indica la cantidad de tiempos o pulsos de cada compás. El número inferior del compás indica el valor o la figura de cada tiempo o pulso. Si el número inferior es un 4, significa que cada tiempo o pulso es representado por una negra. Si el número inferior es un 2, significa que el valor de cada tiempo o pulso es representado por una blanca. Y si el número inferior es un 8, significa que cada tiempo o pulso se mide en corcheas.

Aquí tienes una guía rápida:

Número inferiorFigura / Valor de la nota
2Blanca
4Negra
8Corchea
  • 4/4 significa que hay 4 tiempos en cada compás y que cada negra recibe un pulso. Es decir que habrá 4 negras por compás.
  • 2/4 significa que hay 2 tiempos en cada compás y que cada negra recibe un pulso. Es decir que habrá 2 negras por compás.
  • 2/2 significa que hay 2 tiempos en cada compás y que cada blanca recibe un pulso. Es decir que habrá 2 blancas por compás.
  • 6/8 significa que hay 6 tiempos en cada compás y una corchea recibe un pulso. Es decir que habrá 6 corcheas por compás.

Dentro de cada compás, los tiempos o pulsos pueden subdividirse con figuras más pequeñas que darán “velocidad” al ritmo.

Compases comunes

Al igual que un idioma tiene sus frases y palabras populares, la música tiene sus compases comunes. Estos compases comunes son la columna vertebral rítmica de gran parte de la música que escuchamos. Exploremos algunos de ellos:

Compás de 4/4

El compás de 4/4 es, sin duda, el más utilizado en la música occidental. En el compás de 4/4, hay cuatro tiempos o pulsos en cada compás; y cada tiempo corresponde a una negra. Es el patrón rítmico de muchas de tus canciones de pop favoritas, y es fácil de contar: uno, dos, tres, cuatro. El compás de 4/4 confiere a la música un ritmo de marcha constante, perfecto para marcar el ritmo con los pies.

compás de 4/4
Compás de «C»

Si ves una misteriosa «C» al principio de tus partituras, no te asustes. No es más que otra forma de representar el compás de 4/4. La «C» significa “tiempo común” lo que refuerza la omnipresencia de este compás. Son los mismos cuatro tiempos o pulsos de negra por compás.

Compás de «C»

Compás de 2/2

Pasamos al compás 2/2, también conocido como «tiempo cortado». Este compás tiene dos tiempos o pulsos de blanca por compás. Cada blanca equivalente a un tiempo. Esencialmente, «corta» el tiempo común por la mitad. Es común en piezas musicales más rápidas, ya que permite a los músicos leer y tocar pasajes rápidos con mayor facilidad. Suena casi igual que el 4/4, salvo que tiene un acento más fuerte en el tercer tiempo de cada compás (la segunda blanca).

Compás de 2/2

La abreviatura del compás de 2/2 es la misma que la del compás de 4/4 pero con una línea vertical que la atraviesa:

abreviatura

Compás de 2/4

El compás de 2/4 es otro de los más frecuentes; con dos tiempos o pulsos de negra por compás. Es un compás dinámico, especialmente popular en polcas, marchas y otros géneros de música bailable. Si alguna vez has bailado al ritmo de un pegadizo paso de dos tiempos, habrás sentido el pulso del compás de 2/4.

Compás de 2/4

Compás de 3/4

Por último, pero no por ello menos importante, tenemos el elegante compás de tres por cuatro. Este compás nos da tres tiempos o pulsos de negra por compás. Es decir, tres negras por compás. Es el compás del elegante vals; y de muchas canciones populares y pop. Si cuentas al rítmico de uno-dos-tres, uno-dos-tres; estás sintiendo el vaivén del compás de 3/4.

Compás de 3/4
«Valse d’Amelie» es un hermoso vals con un aire triste. Apréndelo ahora mismo en Skoove:

Pasar a la lección

El compás de 3/8 es muy parecido al de 3/4, excepto que corresponden tres figuras de corchea por compás en lugar de tres negras por compás. “Fur Elise” de Ludwig van Beethoven está escrita en 3/8. Con Skoove aprende a tocar esta bella y atemporal obra maestra:

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Compases irregulares

Aunque los compases comunes sientan las bases de gran parte de la música que escuchamos, los compositores suelen emplear compases irregulares para crear texturas rítmicas únicas. Estos compases no convencionales, a menudo con un número impar de tiempos, inyectan un giro inesperado al ritmo y mantienen en vilo a los oyentes. Profundicemos en algunos de estos intrigantes compases.

Compás de 5/4

El compás de 5/4 destaca por su estructura única. Tiene cinco tiempos por compás; cada tiempo equivale a una negra. Crea un particular ritmo desigual que puede dividirse en subgrupos; a menudo de «3+2» o «2+3», dependiendo del contexto musical.
Compás de 5/4
Una de las piezas más famosas en 5/4 es el estándar de jazz «Take Five», de Paul Desmond. Interpretado por The Dave Brubeck Quartet.

Escrita por el compositor Paul Desmond, la canción se hizo famosa por el pianista Dave Brubeck cuando el single de su banda de jazz se convirtió en un éxito en 1961. Pero el 5/4 ya se utilizaba mucho antes. Gustav Holst utilizó el compás de 5/4 para crear la apertura de su obra maestra, «Los Planetas», escrita entre 1914 y 1916. Creó música dramática para cine en «Marte – el portador de la guerra», que se convirtió en el «sonido» asociado al espacio cuando éste acabó presentándose en el cine años más tarde. Todavía se toca mucho en conciertos y se utiliza en muchos programas de televisión y documentales. A ver si puedes contar cinco tiempos por compás mientras la escuchas.

Otra pieza musical muy famosa en compás de 5/4 es el tema de la serie de televisión y cine “Misión Imposible” (escrito por Lalo Schifrin). En esta estupenda interpretación en directo, el director habla de cómo contar el tiempo de una forma muy divertida.

Compases de 7/4 y 7/8

Los compases de 7/4 y 7/8 aportan una sensación rítmica aún más inusual. Estos compases contienen siete tiempos por compás, pero el valor de la nota que recibe un tiempo es diferente. En 7/4, es la negra, mientras que en 7/8 es la corchea. Esta diferencia en el valor de las notas puede crear distintos efectos rítmicos. Al igual que en el compás de 5/4, los siete tiempos pueden subdividirse en diferentes grupos para variar la sensación rítmica.

Compases de 7/8

Un ejemplo fácil de entender de 7/4 es «Money» de Pink Floyd. Además, las canciones en 7/8 son extremadamente raras y no hay muchos ejemplos, pero un ejemplo es la parte de la melodía A de una banda de pop japonesa. »Beautiful Fin» de Spitz. Estas canciones muestran cómo los músicos crean identidades únicas para sus canciones mediante el uso de compases inusuales.

Los compases irregulares pueden parecer un poco desalentadores al principio, ¡pero no temas! Skoove está aquí para guiarte. Nuestras lecciones bien estructuradas simplifican la complejidad de estos compases; ayudando a familiarizarte con estos ritmos poco convencionales y a ampliar tus horizontes musicales. Así que, ¡prepárate para tocar algunos particulares ritmos y haz que tu viaje musical sea aún más emocionante!

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Compases compuestos

Hemos explorado los compases comunes e irregulares, pero hay otra categoría fascinante por descubrir: los compases compuestos. Estos compases se caracterizan por un número superior divisible por 3, que crean una «sensación triple» en cada tiempo. Veamos los compases compuestos más comunes.

Compás de 6/8

Empecemos con el compás de 6/8. Este compás tiene seis tiempos por compás, y la corchea representa un tiempo. Pero no te confundas. En lugar de parecer seis tiempos separados, suele tener una sensación de «dos tiempos», en el que cada tiempo se subdivide en tres tiempos más pequeños. Por eso, a menudo se cuenta como «UN-dos-tres; Un-dos-tres”.

El 6/8 es un compás popular en muchos géneros musicales, desde las sinfonías clásicas hasta los himnos de rock. Es el compás del jig irlandés y de muchas otras danzas tradicionales.

Generalmente, el compás de 6/8 se divide en dos grupos de tres corcheas. Aquí está el comienzo de la sintonía de «Juego de Tronos» en compás de 6/8:

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Compás de 9/8

El compás de 9/8, al igual que su primo el de 6/8, divide el compás en tiempos más largos que a su vez se subdividen en tres. Esta vez, sin embargo, hay tres tiempos mayores, cada uno de los cuales se divide en tres corcheas. Así que a menudo se cuenta como «UN, dos, tres; DOS, dos, tres; TRES, dos, tres”.

Encontrarás este compás en el mundo de la música clásica y en algunas melodías folclóricas tradicionales. La “Blue Rondo a la Turk” de Dave Brubeck es una versión inusual del 9/8.

Compás de 12/8

El compás de 12/8 es otro compás compuesto. Al igual que el 6/8 y el 9/8, se basa en la subdivisión de los tiempos en grupos de tres. En 12/8, hay cuatro tiempos mayores, y cada uno se subdivide en tres corcheas. Esto crea un ritmo ‘swing’ que suele encontrarse en el blues, el gospel y algunas formas de rock and roll.

Cabe mencionar que una pieza en compás compuesto también podría escribirse en compás simple utilizando tresillos para formar los grupos de tres.

Beethoven escribió la apertura de la Sonata Claro de Luna (op. 27 nº 2 en Do# menor) en compás cortado utilizando tresillos en todo momento:

Compás de 12/8
Si reescribimos estos compases en 12/8, sonará exactamente igual:

Compás de 12/8
Puedes aprender a jugar ahora mismo con Skoove:

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Otra gran canción que está en 12/8 es «Perfect» de Ed Sheeran.

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Compás de 3/8

Por último, tenemos el compás 3/8. Es similar al compás de 6/8 pero parece más rápido porque sólo tiene un tiempo mayor que se divide en tres corcheas. Suele utilizarse para piezas musicales rápidas y animadas.
Los compases compuestos pueden añadir un sabor rítmico único a su interpretación en el piano. “Fur Elise” de Ludwig van Beethoven está escrita en 3/8. Aprenda a tocar con Skoove la bella y atemporal obra maestra “Fur Elise” de Ludwig van Beethoven, escrita en 3/8.

Aunque en esencia es lo mismo que 3/4, puedes suponer que la pieza se tocará un poco más rápido en 3/8. Pero guíate siempre por las instrucciones que aparecen al principio de la partitura para piano, como «Moderato» (que significa velocidad moderada) o «Presto» (que significa velocidad rápida).

Compases impares

Como ves, hay más de una forma de escribir una pieza musical para transmitir el sonido que deseas.

Hay piezas compuestas en compases mucho más audaces. Por ejemplo, la música del juego «The Legend of Zelda: Ocarina of Time – Ganandorf’s Battle Theme» se escribió en 23/16. Esto significa que hay 23 tiempos por compás y que la semicorchea equivale a un tiempo.

Un compositor puede crear cualquier tipo de compás. Sin embargo, hay que tener en cuenta a la persona que va a leer e interpretar la notación musical, y que el objetivo debe ser la claridad.

El «Praeludium 15 en sol mayor» de J. S. Bach está escrito en un compás diferente para cada mano. Compás de 24/16 para la mano derecha y “compás común” (de 4/4) para la izquierda.

Elegir el compás adecuado para su composición

Elegir el compás adecuado para tu composición depende de la sensación y el ritmo que quieras transmitir. ¿Quieres un vals fluido o una canción de rock constante? La elección del compás marcará el tono de la pieza.

No tengas miedo de experimentar. Recuerda que en la música no hay «talla única». La aplicación de Skoove ofrece lecciones interactivas y profesores experimentados para sesiones de aprendizaje en directo 1-1 que te guiarán en este proceso.

Entender los compases es esencial para tu camino en la música y, lo que es más importante, ¡para disfrutar de tus sesiones de piano!. Así que sumérgete en el mundo de los tiempos, ritmos y compases; ¡y estarás un paso más cerca de convertirte en un profesional!.

Tanto si eres principiante como avanzado, Skoove siempre está para guiarte en tu viaje musical. Vamos a darle a las teclas y a crear buena música, ¿vale?

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La autora de este blog

Edward Bond

Eddie Bond es un intérprete multiinstrumentista, compositor y profesor de música afincado en Seattle (Washington, EE.UU.). Ha realizado numerosas actuaciones en Estados Unidos, Canadá, Argentina y China, ha publicado más de 40 álbumes y tiene más de una década de experiencia trabajando con estudiantes de música de todas las edades y niveles.

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